A poco menos de dos semanas del inicio del Roland Garros, Novak Djokovic, que ya no contará con Andy Murray en su equipo, además tomó una decisión inesperada que sorprendió a propios y extraños: tras ser baja en Roma y tener un inicio de temporada irregular, jugará el ATP 250 de Ginebra, que se disputa en arcilla. Esto lo ayudará a recuperar su ritmo, previo al Grand Slam.
Novak Djokovic busca recuperar su nivel en Ginebra
El torneo de Ginebra, que se celebrará del 18 al 24 de mayo, marcará la segunda participación de Djokovic en este torneo. El serbio ya había jugado allí el año pasado como parte de su preparación para Roland Garros, pero este 2023 su situación es distinta. Lo curioso es que en su banco ya no estará Murray, con quien confirmó su ruptura este martes.
A pesar de no haber jugado en Roma, Djokovic decidió desafiarse a sí mismo al aceptar la invitación, con el objetivo de encontrar la forma necesaria para la próxima gran cita del tenis mundial. No es la situación ideal para un jugador de su nivel, pero con el desafío en París al acecho, el serbio tiene poco margen de error.
El año pasado, el tenista alcanzó las semifinales en Ginebra, lo que le permitió ganar confianza antes de Roland Garros. Sin embargo, este año las circunstancias son diferentes.
En 2023, llegó con un récord de 12 victorias y 7 derrotas en la temporada, con resultados inesperados como sus caídas en Montecarlo y Madrid, ambos torneos en los que no pudo mostrar su mejor nivel en tierra batida.
Esta realidad generó incertidumbre sobre su capacidad de rendimiento en un torneo tan exigente como el de París. Sin embargo, este ATP podría ofrecerle la oportunidad de ajustar su juego antes de enfrentarse a la presión de Roland Garros, donde la competencia será aún más intensa.
El riesgo calculado de Novak Djokovic antes de Roland Garros
Con su decisión de participar en el Geneva Open, Djokovic demuestra que no tiene miedo de enfrentar la adversidad en su camino hacia Roland Garros.
Si bien muchos esperaban que tomara un enfoque más conservador para prepararse para el Grand Slam, el serbio se lanza a la acción, buscando retomar confianza y mejorar su juego en tierra batida, donde su desempeño ha estado lejos de lo esperado.
A pesar de llegar a este torneo con pocos partidos jugados recientemente, sigue siendo una amenaza para cualquier oponente. Su participación en este torneo de tenis, al igual que en años anteriores, es una oportunidad para afinar su juego y demostrar que puede competir a su más alto nivel, incluso bajo circunstancias que no son las ideales.




