Columbus Crew decidió mover una pieza que para muchos parecía discreta, pero que dentro del vestidor pesa más de lo que reflejan los minutos en cancha. Renovar a Evan Bush, un arquero que ya bordea los 40, es más que un gesto nostálgico o un premio por servicio. Es una apuesta por alguien que ha aprendido a leer los ritmos de una liga exigente y que, aun sin reflectores, mantiene la brújula del grupo en su sitio.
El club anunció que el veterano portero se queda para la temporada 2026, una decisión que ayuda a sostener la estructura interna de un plantel que todavía digiere los golpes del último cierre competitivo.
Bush venía de un contrato que expiraba en 2025, y aun así el Crew se adelantó para amarrarlo. No se trata de un arquero que viva de protagonismos: la campaña pasada apenas jugó seis partidos y consiguió dos porterías en cero. Pero en esos minutos dejó claro que su oficio no se ha despintado. Su carácter en la portería, mesurado pero firme, sigue siendo una garantía para un equipo que necesita voces con tablas en partidos que se complican desde lo emocional.
El gerente general Issa Tall lo explicó sin vueltas. “Evan ejemplifica las cualidades que valoramos como club, y sabemos que su mentoría combinada y mentalidad competitiva continuarán fortaleciendo a nuestro grupo y manteniendo nuestros altos estándares de cara a la temporada 2026”, sostuvo, subrayando que el impacto del veterano trasciende lo que se ve desde la tribuna. Bush es una especie de enlace silencioso: entiende los ritmos internos, escucha a los jóvenes, baja tensiones y mantiene viva una ética de trabajo que el Crew no quiere perder.
Antes de convertirse en pieza de Columbus, el arquero pasó por Vancouver Whitecaps FC y CF Montréal, dos etapas que le dieron rodaje en escenarios muy distintos. Sus 196 partidos de temporada regular y esas 45 porterías invictas no son números menores: muestran un camino largo, lleno de resistencias, que ahora funciona como referencia para varios jugadores que apenas empiezan a asomar. En una liga donde la rotación es constante y los ciclos suelen acortarse, tener a alguien que entiende la MLS desde dentro es casi un lujo.
El Crew cerró el año con un sabor amargo: séptimos en el Este y eliminados por el archirrival FC Cincinnati. Con ese antecedente, la directiva quiere evitar más sobresaltos. La renovación de Bush es, en parte, un mensaje interno: el 2026 exige orden, liderazgo y un vestidor sólido. Y pocas figuras representan esa mezcla de temple y oficio como un arquero que, a los 39, se mantiene listo para entrar cuando la temporada lo pida.